Existen diferentes iniciativas que están introduciendo la cultura sísmica y la educación sobre terremotos, a las aulas chilenas.
El trabajo de los japoneses en cuanto a la educación, se ve reflejado en la calma y el control de los japoneses frente a los terremotos.
En los colegios japoneses se realizan simulacros de evacuación todos los meses, en cambio en Chile recién se está introduciendo más seguridad y contenidos sobre los terremotos.
Guillermo Calderón, profesor del colegio Las Américas en La Reina, reflexionó: «En Japón se veía que la gente estaba bajo control durante el terremoto, en cambio acá las personas simplemente se descontrolan porque no poseemos cultura sísmica».
Desde 1998, además de charlas con científicos y diversas actividades pedagógicas, 12 colegios tienen instalados en sus dependencias sismómetros y estaciones meteorológicas, verdaderos imanes de atracción para los alumnos.
Hace cuatro años que el colegio Las Américas forma parte del programa gracias a la iniciativa del mismo Guillermo Calderón, los doce alumnos permanentes y quienes muestren interés en el taller pueden «acercarse a mirar el computador que muestra las constantes mediciones del sismógrafo».
El Ministerio de Educación, ha incluido contenidos sobre la generación de terremotos y sus consecuencias, en los currículos de 7 ° básico y 1° medio, además prepara reformas para los contenidos de los programas de 1° a 6 ° básico sobre los riesgos naturales.
Entre el 30 de mayo y el 3 de junio está organizada la «Semana de la Seguridad Escolar» , además se está distribuyendo en establecimientos subvencionados el material educativo «La Familia y La Escuela preparada ante desastres», realizado en colaboración con la Unesco, RSA Seguros Generales y la Asociación Chilena de Seguridad.
La Onemi, capacita a 5 mil alumnos de Antofagasta sobre terremotos y maremotos, además de los simulacros de evacuación dirigidos a la población general realizados en distintas zonas del país. El objetivo es que a través de los escolares el resto de la comunidad aumente sus conocimientos sísmicos.
Desde el pre básico los niños saben exactamente qué hacer si comienza a temblar, a quién deben seguir y qué cosas tienen que llevar con ellos al evacuar.
El gobierno, por su parte, otorga folletos instructivos que llaman a hablar en familia acerca de dónde está el lugar más seguro de la casa y cómo comunicarse si durante el terremoto están en distintos lugares. Además, todos siempre deben conservar una mochila con artículos de emergencia: agua, comida, pilas y linternas.
Fuente: diario.elmercurio
Imagen: google.cl
